Ahora vuelvo en mis sentidos, no tengo la menor idea de donde estoy... es extranio, recuerdo haber estado conversando con esos jovenes pero ellos no hablaban mucho. me siento distante, no consigo descansar aunque estoy tendido comodamente en la cama, al lado mio hay una bandeja pero no siento deseos de comer. El olor de la comida es llamativo pero no puedo despertar mi apetito asi que decido cerrar los ojos, si, solo dormir una vez mas.
la puerta se abre y suena un maullido lejano, la puerta se cierra y entra el joven desconocido - cuenteme pastor, por que se marchaba tan pronto, aun no termina lo que vino a hacer- La ventana a mi izquierda permite ver con claridad un sol matutino y la casa encima de la gran roca, que ganas de estar alla, aunque aqui me siento bien comodo es una sensacion como de inercia. el joven escondiendo una sonrisa que parece maliciosa murmura -por favor sirvase, lleva bastante tiempo sin comer y creo que no podra soportar mucho tiempo en esa condicion. yo no soy de los que cocinan ni nada de eso pero aqui le prepare un plato de lentejas y si gusta tengo algo de cordero asado que muy bien le puede abrir el apetito- en efecto, comi bastante y muy a provecho mio. ya me sentia algo mejor y volvi en mi sentido -acaso usted conoce mi mision?- el respondio -pues no la conozco, aqui pasan tantas cosas que yo no sabria decirle muy bien en cual de todas ellas puede usted ayudarnos, yo estoy tan acostumbrado a esta vida que no se decir muy bien que es real y que es ficticio... es solo que me parece muy extranio que usted no lo haya notado- mi asombro fue muy grande, ahora lo recordaba todo claramente, estuve hablando largo y tendido con losm jovenes pues yo tenia la certeza de que ellos me lo habian pedido pero de sus bocas no habia salido palabra, mas bien, siento como si no pudiera recordar sus rostros aun sabiendo que estaban ahi. es como la sensacion de recordar un suenio, o de estar medio dormido, como volver a los cinco sentidos luego de haber estado vagando en la mente por mucho tiempo. ya no se muy bien que esta sucediendo aqui, por que me enviarian a mi? yo que soy nuevo e incredulo, acaso realmente encontre un fenomeno inexplicable?
entonces el joven se marcha sin que yo me de cuenta, por fin puedo observar con calma la habitacion, esta en orden pero da la impresion de haber estado sellada por mucho tiempo aunque se nota que hubo preocupacion por limpiarla. despues de todo el no es un mal tipo, nadie se molestaria por ayudar a alguien en mi situacion en estos dias. ya ni siquiera hay respeto por la iglesia.
se me fue la maniana en estos pensamientos y a la tarde muy pronto vuelve aquel joven, este chico trae en sus manos un conejo asado en un plato con unas papas cocidas. la verdad sale muy buen aroma pero hay un solo conejo y no le he visto probar bocado de nada. deja el plato en la bandeja donde anteriormente estaban las lentejas y lo acomoda por mi, es bastante amable en realidad aunque parece muy frio, tanto que incluso tengo miedo de darle las gracias aunque lo hago de todos modos. -acaso no va a probar usted bocado- me mira algo extraniado, sorprendido mas bien -no, yo no como conejo.
asi se me fueron tres largos dias que pase recuperandome, no se exactamente de que me estaba recuperando y el tampoco me quiso decir. cuando me hube levantado le agradeci sinceramente su hospitalidad y trate de dejarle algun dinero a cambio, pero se nego y hasta se mostro ofendido. cuando me fui el ya estaba lejos y no me pude despedir.
Voy subiendo la cuesta hasta donde estan las botellas, es temprano aun, llegue al punto exacto donde me desmaye la ultima vez, y ahi estan las... tumbas!
que es esto? las botellas que supuestamente eran tales no lo eran, eran tumbas, lapidas de vidrio y bastante grandes. Debe ser un efecto del sol que da la impresion de que cambian la posicion dependiendo de la hora del dia, por ahora me limitare a anotar en mi croquera la posicion de las tumbas y los nombres escritos para cuando vuelva. Creo que fue mucho pedir enviar a un simple aprendiz, encima incredulo, a trabajar en estas cosas. la verdad ni siquiera se bien por que acepte, tal vez queria creer.
El bus llego, y me parecio muy extranio ya que solo llegaba los domingos, pero es sabado... creo. ya no estoy seguro de nada. Espero que comprendan mi situacion en la iglesia.
viernes, 4 de julio de 2008
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